PICOS, GRITOS Y ASESINOS.
Desde que te escuché hay unos fantasmitas que se han instalado en mi cabeza. No tienen el aspecto de ser malos pero intuyo que no van desistir en su empeño. Me quieren corriendo por la ruta de los seis picos, la de los gritos y los asesinos. Por ahora está en mi cabeza y los fantasmitas no tienen la intención de marcharse tan deprisa. Me quieren corriendo por tu causa y la de tantos otros. Me quieren corriendo acompañado por tu recuerdo. Para mí estás en esa carretera. Para otros frustrando victorias. Poco importa ahora. Alguien me golpea la cabeza porque hay algo dentro de ella que quiere salir hacia fuera. Quizás sea el momento. ¿Qué me detiene? ¿Una duda?, ¿un miedo?… Creo que puedo con todos ello.