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¡Salud!

Si de ella gozara en su extensión, ejercería todas y cada una de las funciones con cierta normalidad. Pero como la plenitud es difícil de alcanzar, me limitaré a formar y deformar la función expresiva del lenguaje. Y en numerosas ocasiones, el sentido es impenetrable.

"LA PRÓXIMA VEZ NO HABRÁ PRÓXIMA VEZ."

"LA PRÓXIMA VEZ NO HABRÁ PRÓXIMA VEZ."

Hoy podría inventarme una historia. Soñar que atravieso paredes y a través de la brecha dejar que se escapen algunos secretos. Pero prefiero seguir fiel a mi estilo y salir por la puerta sin alarmismos ni provocando abismos. Conducir dos minutos y aparcar el coche entre las zanjas y el reguero. Colocar el bidón de agua en el techo y correr bloqueando el ritmo, los kilómetros y el tiempo. Pero el estado de transición se ha quebrado al ver a los patos. ¿Por qué huyen los patos? De los huertos he saltado a Los Soprano. Un protagonista, una crisis de ansiedad, una terapia, unos huertos, unos muertos y una frase que se repite en mi cabeza: “ La próxima vez no habrá próxima vez.”

PICOS, GRITOS Y ASESINOS.

PICOS, GRITOS Y ASESINOS.

JARROS HELADOS

JARROS HELADOS