GREY HOUSE
Esta mañana se ha despertado con un fogonazo. Segundos después, se ha incendiado la basura. No recuerda en qué momento arrancó el precinto al filtro. El olor que desprende un fisgón petulante es muy desagradable. Lo primero que arde son sus piernas. ¡Cobarde! Pronto su llamada se ahogará. ¿Hay alguien ahí? ¿HAY ALGUIEN AHÍ? Ya no le quedan fuerzas. Quizás ahora entienda que aquellos que estaban cercanos a su círculo tan solo le toleraban. ¿HAY ALGUIEN AHÍ? La casa se tiñe de gris. Cenizas donde hubo huesos. Recoge los restos con una pala y levanta la tapa del váter. Deja caer los recuerdos sobre las paredes de porcelana y antes de tirar de la cadena, descorcha las cuatro botellas y vierte el vino en el retrete. ¡Salud!