NO ME HE COMIDO UNA "D"
Llevo varios días paseando cierta incertidumbre. Yo, que había sido hombre de tradiciones, he roto con mis decisiones. Pero tengo la sensación que la letra d se me ha atragantado. Me duele ser un traidor. ¡Por favor, no dramatices! Esto es lo que mil y una vez me repites. Y cuánta razón tienes. Cada vez que me preparo para salir a correr, me sigo vistiendo por los pies. Y en estas sesiones de titubeo, uno de los alicientes es navegar, veo, veo y por qué no, decidirse por el pruebo.