TODOS COMETEMOS HERRORES
Todos cometemos herrores. Como el que una vez dijo que sí cuando le propusieron abrir el Festival Íntims. El imaginario le jugó una mala pasada y para nada se esperaba que la intimidad quedara relegada frente a la disposición esperpéntica de la sala. Fila, en lugar de codazos, para pedir una birra. Sillas frías, micros sin batería y una cuña entre la letra para confesar: esto ha sido un error. Mal de muchos, consuelo de tontos porque todos hemos pensado: ¿qué hago aquí, carajo! Pero pateada la forma, aplaudamos al fondo porque si algo sabe Nacho es escribir, decir, hablar y cantar. El género bobo no va con él. Ese género se lo reservamos a quien un día se levantó pensando: voy a reservar la sala Cotton Club del Casino de Barcelona para programar un festival que nombraremos Festival Íntims y engañado por la solemnidad melancólica de la intimidad atraeré a Nacho Vegas como cabeza de cartel.