DE ENTRADA: LEJOS DE LA PLAYA Y CON CONFIANZA
A primera hora de la mañana he paseado con Ipo por la playa. Las botellas de vidrio y los vasos de plástico son el testigo de una vigilia de excesos. Las huellas desnudas que hay en la arena nos dicen que todo acabó en receso. Otra noche acariciando sueños… La playa es para disfrutarla en otoño, invierno y primavera. En verano es mucho mejor huir de ella.
Sigo ampliando el radio con paseos diarios y como el solitario de la madrugada me he excedido en mi confianza. Corazón roto para uno y un dolor profundo para otro. Una contusión en el hombro que aplaca cualquier alarma. Un par de días de reposo y cuidados con hielo. El soleo sigue su camino y en los próximos días tocará una resonancia. Y como el desconocido o desconocida de la playa la afrontaremos con confianza. Después ya veremos. Quizás acabe la semana en la playa.