YO SOY EL TENEBROSO
Vi pasar al tenebroso que disparó con odio al payaso visionario, al gallo tarado que nació con un ¡Vamos"! y al comentarista que descubrió hace dos amaneceres la disciplina. El romanticismo se ha despeñado por el precipicio. Su esfuerzo se ha ido diluyendo al constatar que el sigo XXI nació con el sol dándole la espalda. Afortunadamente los caminos siguen vacíos, los pensamientos siguen fluyendo, el recuerdo sigue existiendo y las noticias siguen cintilando las inquietudes.