EL REY OÍDOS
Lo han coronado como Rey gracias a su oído. Lo tiene tan fino como el de un felino. Frente a él tiene una posibilidad real. Pero la realidad que presenta es una percepción errónea. Él sabe mejor que nadie que por ideas tiene dos orejas. En el pasillo ya no hay corrillo. Silencio. El último comodín quema en la hoguera. Y en el despacho cuelga una cuerda…Rey Oídos busca, busca el camino antes de que llegue el afilador del cuchillo…